Hungría es uno de esos países que, quizá no se hable mucho de ellos, pero que esconden un precioso mundo detrás y que sin ninguna duda, merecen ser visitados. Grandes ciudades, bonitos paisajes, unos ciudadanos amables y cercanos…este país lo tiene todo para convertirse en un perfecto destino turístico. Y, por supuesto, en todo viaje que se precie, hay que visitar los pueblos. Esos pequeños lugares llenos de magia y encanto en los cuales desconectar un poco de la ciudad y su ruido. Hoy os traemos los pueblos más bonitos de Hungría.
Sorpron: Hungría cuenta con su propio reino
Este pueblo, que se encuentra haciendo frontera con Austria, se podría catalogar como un reino propio. Majestuoso y con mucho encanto, este sobrecogedor pueblo posee una gran cantidad de monumentos y lugares que visitar. Comienza por su ayuntamiento y la torre medieval, una bonita obra que data del siglo XII y que cumplía la función de controlar y vigilar incendios.
Puedes continuar recorriendo su casco histórico, con un aspecto alegre y llamativo, lleno de flores y terrazas. Sus casas son de un estilo arquitectónico popular y en la plaza Széchenyi encontrarás el centro neurálgico del pueblo. Por si fuera poco, sus murallas romanas y mansiones de estilo barroco, le dan ese toque de reino que hacen de este uno de los pueblos más bonitos de Hungría.
Visegrád: Uno de los pueblos más bonitos de Hungría
A orillas del Danubio se encuentra uno de los pueblos más bonitos de Hungría. Una grandiosa y enorme fortificación hecha pueblo, que servía como zona de defensa. Visegrád es un pueblo de corte medieval que cuenta con una fortaleza en el monte Fastness de muy bella factura. Este fotogénico pueblo medieval cuenta con numerosos rincones y paisajes que lo convierten en un lugar especial, el cual poder visitar con familia o amigos, disfrutando de sus paisajes y su cultura.
Admira su palacio renacentista, lleno de jardines, fuentes y numerosos elementos decorativos, que gracias a la restauración se ha convertido en un lugar hermoso y una visita obligada en tu paso por Visegrád. Si quieres trasladarte a un lugar y época pasadas, este es tu sitio.
Eger: Arte y cultura reunidas en este pueblo
Hablar de Eger, además de hablar de uno de los pueblos más bonitos de Hungría, es hablar de arte. Arte y multiculturas, ya que este precioso lugar es un museo vivo en constante movimiento que reúne todo el bagaje de este bonito país. Uno de sus iconos más importantes es el minarete otomano. Se trata del más septentrional de aquellos que aún se conservan. Una majestuosa torre con más de 40 metros de altura que actualmente hace las funciones de mirador.
A los pies de esta se encuentra un pueblo con casi veinte iglesias de estilo barroco, un castillo, una catedral y algún baño turco. Además, sus bodegas y el conocido “Valle de las mujeres hermosas” le dan a Eger un toque especial, mágico e inigualable. Un pueblo que sin duda recomendamos visitar.
Esztergom: Majestuosidad y elegancia
Entre tanto pueblo pequeño, simpático y hogareño, Hungría necesita uno de esos pueblos imperiales, majestuosos y grandes. Y esto lo encuentra en Esztergom, uno de los pueblos más bonitos de Hungría, y además, una “ciudad” imponente, arzobispal y que ha sabido mantenerse con el paso de los años gracias a su legado histórico y , por supuesto, el dinero.
Durante tu estancia en este pueblo, podrás visitar lugares como la basílica, su estatua de la conversión de San Esteban, el Ayuntamiento y sus antiguas murallas de la villa medieval. Además, su majestuoso castillo sigue conservando su gracia y misterio, atrayendo a numerosos turistas cada año. Uno de esos pueblos especiales que merecen la pena ser visitados.
Zebegény: El mármol de la curva del Danubio
El Danubio ofrece muchos secretos y este sublime enclave de corte urbano es uno de ellos. Se trata de uno de los pueblos más bonitos de Hungría y toda una declaración de amor a la naturaleza y el sol. Este pueblo está plagado de mansiones de colores blancos y apariencias delicadas que han hecho que este pueblo sea conocido como “El mármol de la curva del Danubio”.
Entre sus rincones y calles podrás ver algunos de sus monumentos como el Palacio, el Castillo de Dory, la iglesia, el puente o el Millenium Park, uno de los rincones más especiales del pueblo, que sin duda no te puedes perder.